viernes, 12 de junio de 2009

Más que marcas sobre el pavimento

Dije que la siguiente vez que escribiera una entrada relataría lo otro malo que me pasó el pasado fin de semana pero la verdad no tengo ganas. Mejor les voy a contar mi dia de ayer.
Desde la mañana hasta las 4 de la tarde me dormí me desperté, hice cosas variadas y volví a dormir. Después porfín fui al gimnasio y no me sentí tan mal conmigo misma (excepto quizás porque perdí muchísima condición en mi ausencia de mes o mes y medio)y después de bañarme, etc., quedé en pasar por mi novia a su trabajo.

Para ahorrarme el desagradable tráfico de gonzalitos me fui por no sé dónde. Ya he ido por ahi varias veces pero siempre acompañada así que nunca pongo atención, solo manejo en automático. Ahora que fuí sola todo iba bien hasta que de pronto me norteé y pensé que iba por donde no era. Como no veía ningun retorno cercano aproveché para dar una vuelta medio ilegal de 180° grados, que estubo perfecta excepto por el horrible rechinar de las llantas contra el pavimento y el pitar (probablemente acompañado de maldiciones) de un carro que venía atrás de mi y que probablemente se asustó demasiado por mi sorpresivo cambio de dirección, pobrecito.
Que sucediera aquello me dio mucha risa porque yo misma he sido victima de las vueltas dementes de 180° grados producto del manejo impulsivo de mi mamá. Una vez pensé que iba a morir, camino a mi graduación, por que en serio estubo mal, mal esa vuelta. Quedé aferrada al asiento del copiloto y casi parecía como los gatos de las caricaturas cuando se asustan y se erizan todos y quedan aferrados al techo.

Bueno, total que ya porfín llegué al mentado lugar donde trabaja mi novia y fuimos a cenar a un lugar de comida china (Shing Long sobre Lázaro Cárdenas, esta muy rico)y de camino ahi me metí a la lateral mucho antes de lo que era, nimodo. La verdad creo que a lo mejor fue algo de destino porque mientras iba conduciendo mi novia reconoció a un amigo del trabajo y yo "Oh Abi!" y me di otra vuelta asesina pero esta vez hacia una gasolinera (peligroso). En ese momento felicité a mi naturaleza medio impulsiva (a veces) porque Abi se nos unió para cenar.

Fue una cena muy agradable, Abi fue el que habló más pero esta bien, el es un hombre muy: guapo, agradable, chistoso, culto e inteligente. Así que nos la pasamos muy entretenidas.
De todo lo que platicó creo que valoré más cuando nos empezó a contar sobre sus diarios. Empezó a llevar un diario a los 14 años más o menos y ahorita el tiene creo que 29 y no sé cuantos diarios, creo que 19. Aparte de él solo conozco a otra persona que a ciencia cierta lleva diarios desde hace mucho tiempo pero creo que a esa otra persona no le pregunté mucho sobre ellos.
A Abi le dije que a mí se me hacía muy fascinante que llevara diarios desde hace tanto tiempo. Yo misma he tratado de escribir en un diario como dos o tres veces pero nunca le he hallado el gusto. Abi me contó que muchas personas creen que escribir en un diario es algo asi como,

"Buenas tardes querido Diario. Hoy te quiero platicar que me levante y me bañe. Después me estaba cepillando los dientes y mi hermanito vino corriendo, se tropezó y se rompio el hocico, luego bla bla bla bla..."

pero que la verdad no era así. El dijo que en su caso particular (quien sabe los demás) sus diarios son sus memorias, sus recuerdos. En el diario él no le cuenta las cosas a nadie más que así mismo, él escribe para él, mañana.
Qué bonita manera de decirlo, no sé, me pareció muy interesante.

Creo que una vez más consideraré la posibilidad de llevar un diario. Lo siento más o menos lo mismo que con mi cuaderno de escritos. Ya tengo uno pero creo que no es el correcto. Así como hay libros para que los leamos, hay cuadernos para escribir en ellos, pero no todos son correctos. Necesito dos cuadernos que me inspiren, que me llamen para llenar sus hojas, uno será mi cuaderno de escritos y el otro probablemente sea diario.

Quien sabe... bueno es todo.
Gracias por leer.
Ciao!

lunes, 8 de junio de 2009

Cierres, negaciones y sin sentirme tan mal

Pues que fin de semana, la verdad. Bueno, fin de semana incluyendo el jueves. Creo que hace mucho que no tenía esa mezcla de furia, enojo, tristeza y frustración todo al mismo tiempo. Es en este tipo de ocasiones que me alegra ser distraida pues de lo contrario creo que ahorita todavía estaría de mal humor.

Sinceramente yo tengo una idea relativamente buena sobre mi relacion con otras personas. Por lo general yo caigo bien y si no entonces caigo equis y como no me junto con personas a quienes no les agrado entonces no tengo trato pues... con personas a quienes no les agrado. Sin embargo el jueves tuve una pelea con alguien que me recordó como yo también soy victima del drama de la vida, por mucho que intente safarme.
Lo que pasó exactamente no lo detallaré pues sería una falta de respeto para con esta chava pero... pero yo no soy una persona hecha solo de buenos sentimientos. La verdad quisiera que esta chava me recuerde cada de vez en cuando y se entristezca y se arrepienta por haberme arrinconado a dejarle de hablar y haber destruido los ya de por si débiles cimientos de nuestra amistad. Yo quise mucho a esta chava y estoy conciente que la lastimé pero ¿desde cuando se castiga a alguien por no corresponder sentimientos? ¿Soy una aprovechada por haber desistido de jugar con los sentimientos de una persona, por haber tomado responsabilidad de mis acciones y haberle puesto un alto a algo que solo se iría haciendo peor con el tiempo? Según yo no pero al parecer sí.

Diré una queja directa: "... si de verdad te lastimé tanto, si honestamente ante tus ojos me aproveche de ti porque por casi 2 años me seguiste hablando como si nada, ¿porque bromeaste conmigo?¿porque reiste conmigo? Yo te dire por qué, por hipocresía y miedo, el miedo de aceptar que también fue tu culpa, que tu aceptaste el riesgo a salir lastimada, que yo te hice un favor al parar las cosas a tiempo porque de no haberlo hecho entonces tu te hubieras podrido en sentimientos no correspondidos".

Mmm... quizás es medio dura la queja ¿no? No importa, también fue dura la acusación.
Bueno ya me siento algo más desahogada en ese aspecto. Ahora con el siguiente.

Oh no saben que jajaj suficientes malos sentimientos, el siguiente lo digo después. Ya me dio hambre.
Gracias por leer. Ciao.